Esta broma consiste en un tipo que finge ser mudo, se sienta en una banca y comienza a señalar su reloj como tratando de decirle algo a la víctima de la broma (que son varios) todo es silencio y las personas tratando de entender lo que quiere el falso mudo se pegan un buen susto cuando este lanza un grito en el momento menos pensado.
Es muy gracioso ver la reacción de la gente pero parece más divertido ver cómo se desquitan con el tipo a golpes por chistoso.